Siempre se dice eso de que el tiempo pasa volando, que diez años no son nada y que apenas se puede disfrutar de las cosas porque se te escapan entre los dedos a lo largo del tiempo. En este caso no es así, y hoy, al cumplirse los 10 años desde el inicio de este bonito proyecto, son tantos los recuerdos, los momentos, las personas y las situaciones que me vienen a la mente y que quisiera rememorar, que se me hace imposible el poder reducir este homenaje a apenas un post. Han sido diez años increíbles, y los he disfrutado al máximo, cada momento, cada paso hacia adelante, cada hito superado, y también cada aprendizaje. Todos han sido parte de este sueño que se sigue cumpliendo cada día que tengo el privilegio de seguir disfrutando de mi proyecto. No tengo clara la meta, porque de haberla aún queda lejos, pero sea cual sea, tengo claro que nada será comparable con el camino del que disfruto cada día.
Si tuviera que decir el primer recuerdo, sin duda serían aquellos primeros días tras lanzar la web, la ilusión de empezar, el contarlo a todos, las expectativas, esos primeros momentos son impagables. Recuerdo con mucho cariño las entrevistas en la radio para explicar el modelo de negocio, la gran acogida, y las muchísimas muestras de cariño y apoyo tanto de amigos y conocidos, cómo incluso de quienes me descubrían en ese momento. Antes de eso, desde luego no me olvido de cómo empezó todo, una tarde cualquiera de sábado, disfrutando de una sobremesa familiar en casa de mi madre, ahí empezó todo, un 23 de noviembre del año 2013. El nombre salió en el momento, y fue como una inspiración que alguien del cielo me regaló para empezar, me encantó, estaba disponible, y no podía definir mejor el proyecto, y lo que siempre he sido. Desde esa misma noche, a full con ello, que es lo que pasa cuando las cosas te llenan por completo, que no te las puedes quitar de la cabeza, y que no ves el momento de dejar de dedicarle tiempo. Desde ahí, hasta el 1 de febrero en que empezó todo oficialmente, fue un no parar de disfrutar y de ilusionarme cada día un poquito más.
Del resto, me vienen a la cabeza sobre todo los primeros clientes, la confianza que me demostraban, al contratarme y en el día a día del trabajo cuando en muchos casos ni me conocían. Aquello me pareció extraordinario y desde luego no era más que un incentivo para dar el mil por cien cada día por y para ellos. Esto sin duda es lo que más valoro, y más si cabe ahora que el 100% de nuestros clientes están online. El que una persona de Valencia, Barcelona o Sevilla, y que nunca te ha tenido delante físicamente, pueda confiar en ti hasta el punto en que lo hacen, es algo extraordinario. Una de esas cosas que corremos el riesgo de minusvalorar por ser habitual, pero a la que sin duda en lo personal doy mucha importancia.
Y llegados a este punto, igual es pecar de poco ambicioso, pero sinceramente no pido más, porque realmente no puedo querer más. Poder seguir disfrutando del camino, de esta experiencia que es más maravillosa cada día que pasa, y sobre todo de vosotros, clientes, compañeros, amigos, de todos, porque sin duda, lo más importante no es lo que tienes, sino con quien tienes la suerte de compartirlo…
¡Seguimos viéndonos en el camino! ¡Gracias por acompañarme!